Hola, mi nombre es Jessica
Huerta y he estado realizando mis prácticas Erasmus en Hamburgo, la segunda
ciudad de Alemania. Ha sido una experiencia realmente gratificante, tanto
personal como profesionalmente, de la que he aprendido muchísimo y que volvería
a repetir. Con esto, no quiero decir que no haya habido dificultades porque, si
sales de tu país, sabes que te enfrentas a obstáculos de todo tipo.
Por un lado, está la dificultad
del alojamiento, ya que actualmente en Hamburgo existe una burbuja inmobiliaria
y es casi imposible encontrar un alojamiento a un buen precio durante tres
meses. En cuanto a la comida, he tenido la suerte de que en la Escuela Infantil,
donde he realizado mis prácticas, las educadoras comían el mismo menú que los
niños, por lo tanto no he tenido que hacer frente a ese gasto, salvo en cenas y
fines de semana. En cuanto al dinero de la beca, en mi opinión no es suficiente
puesto que los alquileres son bastante elevados y no ha cubierto ni siquiera el
alojamiento durante mi estancia. Hamburgo es una ciudad cara y no todo el mundo
puede asumir tantos gastos.
En mi Escuela Infantil o Kindergarten
"La Cometa" he podido sentirme como una más. Todo el personal me ha
apoyado desde el minuto uno y me han asignando las mismas funciones que
cualquier educador dentro de la Escuela Infantil. Sin duda, gracias a esta
ayuda y esta confianza, he podido crecer profesionalmente y aprender de
auténticas profesionales, las cuales han ido dándome consejos pero siempre
manteniendo mi forma y mi manera de enseñar.
En mi Escuela Infantil se habla español,
por lo que he podido adaptarme con mayor facilidad. El idioma que he utilizado
durante estos tres meses ha sido el inglés y creo que he avanzado bastante en
cuanto a fluidez y vocabulario. A pesar de ello, me gustaría seguir aprendiendo
y perfeccionando tanto el inglés como el alemán porque creo que me podrá
resultar necesario en mi día a día. Durante mi estancia en Hamburgo, he podido viajar
a Polonia, un país por el que sentía bastante curiosidad y, debido a la
cercanía y al cambio de moneda, la verdad es que nos salió bastante económica esta
visita.
Mi propósito inicial era hacer las
prácticas Erasmus como una experiencia que iba a durar tres meses y, sin
embargo, me he quedado tan maravillada con la ciudad que no he dudado en
aceptar un puesto de trabajo por un año que me han ofrecido en la misma Escuela
Infantil donde he realizado las prácticas. Una oportunidad que no voy a
rechazar porque me he adaptado bastante bien y sobre todo porque me ha
encantado vivir allí. Así que ahora me espera un año lleno de nuevas aventuras
y de objetivos por alcanzar.
Jessica Huerta Lorca
0 comentarios:
Publicar un comentario